Aviso Importante

A partir de mi regreso a México, el 24 de noviembre de 2008, decidí dejar de publicar en este espacio, con la intención de respetar el cierre de un ciclo. Desde el mismo día, puedes visitar mis ocurrencias en Ernesto-BCN. ¡Gracias por tu visita!

martes, 1 de julio de 2008

Conectando con poca conexión en JFK

Sí, suena extraño, paradójico o hasta ridículo. Me explicaré. Estoy en el aeropuerto JFK de NY. Aterricé a las 12.45 PM, hora local. La salida de mi vuelo hacia el DF está programada a las 5.55 PM. (La conexión no fue tan breve como creía, ya se ve.) Una vez atravesado el control de pasaportes, recibido y re-entregado el equipaje, y superados nuevamente los controles de seguridad, me encuentro en la Terminal 3, para esperar mi nuevo vuelo. ¿Qué se puede hacer? Esto es un infinito centro comercial. No se trata de una mera provocación para el consumo. Estoy hablando de una presencia tan invasora de los comercios que me agobio de describirlo. Poco espacio para cualquier cosa que no sea consumir. Y cuando encuentro una sala relativamente tranquila, ¡no existe manera de conectarse a internet! ¡Increíble! ¡Estoy hablando de JFK! Recorro varias. Algunas llenas, algunos pasillos más o menos despejados. Y nada. Al final, estoy en la Sala 6, donde en un rato se abordará un vuelo hacia Salt Lake City. Una sala medianamente ocupada donde ¡milagrosamente hay red inalámbrica!

Toda esta búsqueda era para revisar correos, matar un poco de tiempo y, sobre todo, para escribir aquí un par de líneas. Decir que estoy emocionado. Que lo de las dos lágrimas sucedió casi como lo describí en la entrada anterior. (Casi porque no fueron una y una, fueron muchas y muchas.) Que seguramente en el vuelo que sigue esas emociones seguirán revoloteando. Que quiero llegar a México, tanto como ya echo de menos Barcelona. Que conforme pasan los minutos, me angustia no ser capaz de conservar lo que he descubierto, y dejarme devorar por la inercia, por los itenerarios. No será fácil. Pero estoy convencido de que el esfuerzo por cuidar esto que he venido descubriendo, bien vale la pena.

Por lo pronto, ya estoy más cerca.

2 comentarios:

Lau dijo...

parece extrano a veces pero los aviones y aeropuertos son lugares que inexplicablemente nos mueven emociones. Alegrias, tritezas, todo se vuelve mas fuerte en un aeropuerto o en los estrechos asientos de un avion. que gusto saber que estas ya en Mexico, por mi parte estoy en Canada en mi propio preceso de llegada-estancia-descubrimientos-amistades-despedidas por eso la falta de acentos.

saludos!

ErnestoPC dijo...

Definitivo... En los últimos años he pasado muchos momentos en aeropuertos por x o y, y la verdad es que cada vez que estoy en esos espacios descubro cosas increíbles. Son sin duda una inmensa fuente de inspiración, quizá por que sintetizan todos las dichas y los males de nuestro mundo posmoderno. Un beso hasta donde andes en este momento Lau.