Aviso Importante

A partir de mi regreso a México, el 24 de noviembre de 2008, decidí dejar de publicar en este espacio, con la intención de respetar el cierre de un ciclo. Desde el mismo día, puedes visitar mis ocurrencias en Ernesto-BCN. ¡Gracias por tu visita!

miércoles, 20 de febrero de 2008

Matiz

Ayer escribí la palabra "miedo". Y no sé si usé el término correcto. Si bien en otras ocasiones he vuelto a mis entradas y he corregido detalles, ha sido puliendo la puntuación, la ortografía o algún error de dedo. Y en este caso, si bien hoy, día 20, no considero que sea la palabra más apropiada, he decidido dejarla porque si está ahí debe ser por algo. Sin embargo, la matizo. En ese contexto, pienso en el miedo como inquietud, incertidumbre... Como el temor de que aquello que, tardíamente sin duda, creo empezar a comprender, se nos descubra ya tarde. Miedo como una forma de anticiparse a la reacción voraz de quienes con su celebración en nombre de lo que anuncian como la "llegada de la democracia", sólo disfrazan su ambición de mercado.

Y quizá la palabra me vino también por ese fragmento de los Balcanes que me da vueltas en la cabeza. Y que cuando lo pienso, percibo con más claridad eso que, aunque todavía sin peste evidente, ya se respira en el aire. No es que se respire desde ayer, antier ni cualquier otro día concreto. Sin duda se trata de algo en la atmósfera que nos viene de siempre y que con cierta frecuencia reaparece con más fuerza. O quizá me equivoco y la pestilencia es tan grande que la hemos ido conteniendo con perfumes que nos permiten caminar como si nada.

Lo cierto es que la Historia se está haciendo. Y conviene estar despiertos.

No hay comentarios: