Aviso Importante

A partir de mi regreso a México, el 24 de noviembre de 2008, decidí dejar de publicar en este espacio, con la intención de respetar el cierre de un ciclo. Desde el mismo día, puedes visitar mis ocurrencias en Ernesto-BCN. ¡Gracias por tu visita!

sábado, 18 de octubre de 2008

La misma historia una y otra vez

Rara, pero en verdad rarísima vez, abro uno de los abundantes FW's que llegan diariamente a las bandejas de mis cuentas de correo electrónico. Para que me anime, tienen que coincidir ciertas variables. 

Primera: el remitente debe ser un primerizo en mis contactos o alguien que sabe bien de mi obstinada negación a revisar esos mensajes, lo cual le conduce a ser selectivo con sus envíos. Segunda: el encabezado del correo debe tener cierto gancho, lo cual descalifica todos aquellos que comienzan con el ordinario "Buenísimo" o el desgastado "Tienes que ver esto"; ambos encabezados suelen advertir lo opuesto. (Una excepción a esta regla es cuando el remitente de plano nunca manda ese tipo de correos, de modo que su envío se convierte en una auténtica excepción per se.) Tercera: que el mensaje no contenga archivos para descargar; esta variable no es definitiva, pero sí ayuda a agilizar mi decisión sobre abrir el correo; acepto, sin embargo, que algunos mensajes que no cumplen este requisito han llegado a gozar de mi contemplación -aunque esto suele suceder días después de recibirlos-. 

En estos días abrí uno de los mensajes que cumplía los tres criterios. Mi amigo Jorge suele ser selectivo con lo que me envía; su correo se titulaba Cuatro cosas que creo que no conoces de mí, lo cual reconozco me intrigó. Y como no venía con adjuntos, lo abrí. Era uno de los llamados "chismógrafos" y, efectivamente, me hizo conocer cosas que ignoraba de mi cuate. Hasta ahora no he seguido la solicitud de respuesta y reenvío que invariablemente cierra todos estos correos. Me quedé estancado en la primera pregunta, reflexionando sobre mi primera -y supongo auténtica- respuesta.

El planteamiento en cuestión era: "Cuatro películas que vería una y otra vez". Por un segundo cruzó mi mente el típico "Imposible, son muchas", pero pronto me di cuenta de que probablemente no eran tantas. "Una y otra vez". Se dice fácil. Todos hemos visto películas que, nada más empezar los créditos finales, nos provocan ese "la podría ver mil veces" o algo parecido. Pero, ¿de verdad? Creo que uno sólo puede estar seguro de eso cuando auténticamente lo ha intentado y ha vivido la experiencia de ver esa película una y otra vez. Así, lo que al inicio era un tantas=miles se puede reducir a un tantas =decenas, por lo menos. 

En mi caso es verdad que son muchas las películas que he visto varias veces y podría volver a ver. Pero si le doy a ese "una y otra vez" el sentido de descubrimiento permanente, de descubrir una peli igual que la primera vez, quizá la lista se reduzca. Así las cosas, empecé a hacer mentalmente mi relación de cintas. Y lo que me sorprendió fue que la mayoría de las películas que me venían a la mente cuentan, en diferentes modos, tonos, épocas, estilos, la misma historia. Lo cual me lleva a concluir que, no es sólo que sean un puñado de pelis las que puedo ver una y otra vez. Parece que hay una historia que puedo ver una y otra vez sin cansarme de ella.

Las cuatro que debo reconocer como primera reacción son: Great Expectations, Moulin Rouge!, Shakespeare in Love y The Bridges of Madison County. Cuando vi los denominadores comunes, decidí pensar en otras. Primero vino a mi mente The Age of Inocence, es decir, seguía en las mismas. Después, creí salir de la fórmula cuando pensé en Rent, pero lo cierto es que pese al final feliz, para mí ver Rent sigue siendo ver La Boheme y el happy ending se vuelve relativo. 

Al final logré salirme del esquema y recordé películas como Back To the Future (partes I y II) o la saga de Pirates Of the Caribbean (sobre todo la segunda entrega, Dead Man's Chest). Incluso logré recordar mi obsesiva forma de ver y re-ver Modern Times de Chaplin, o la cantidad de veces que, desde niño, he visto sin cansarme The Sound of Music. Pero confieso que evocar todas estas últimas significó poner a trabajar fuerte a la memoria. 

Sin embargo, las primeras brotaron con claridad prístina. No deja de maravillarme el hecho de poder hallarme ante la misma historia una y otra vez, cautivado siempre como si estuviese ante una experiencia nueva.







4 comentarios:

ErnestoPC dijo...

No tiene ni media hora que publiqué la entrada y ya me estoy contestando a mí mismo... Antes de que alguien me lo vaya a echar en cara, acepto que Great Expectatios no sigue exactamente el mismo esquema de las que pongo a su lado. Pero hay elementos que sin duda me llevan a ubicarla como, en cierto modo, la misma historia. ¡Uf! ¡Ya se ve que ando liado pensando en estas películas! jeje

Lau dijo...

jajajaja suele pasar. Películas que puedo ver una y otra vez de principio a fin : The notebook, Sensatez y sentimientos, Mujercitas, Harry Potter and the prisioner of Azkaban, Before sunset, Toy Story 1 y 2. Al menos son las que se me ocurren por ahora. saludos!

Luna Quisan dijo...

Ya veo que eres de los mios, Great Expectatios es una excelente pelicula, que te pone a vibrar.. me encanta... tu lista es de lo mejor, aunque yo le agregaría una más "el fantasma de la opera".. y bueno tambien coincido con lau.. sensatez y sentimientos es lindisiisima.. ay esas peliculas me matan.. son los clasicos de la vida!

La "Y" dijo...

Uyyy pos a mi tambien me encanta Great Expectations, desde la primera vez que la ví, quedé impactada...otra que me encanta es flashdance jajaj si ya sé...los tomates verdes fritos o algo así...el diario de bridget jones, un angel enamorado, monsters inc (jajaja) y entrevista con el vampiro, que horror no???, creo que jamás podré ser una buena crítica del cine...besos