A ratos tanto me bloquea. Me deja como pasmado. Me pierde en el vacío. Y pese a ser tanto parece nada. Pero la clave es reconocer que la parálisis es pasajera. Y que tanto no desaparece. La claridad vuelve. Y de alguna manera se hace posible retomar las cosas. Quizá más lento. Quizá con más calma. Dejar que las cosas hallen su sitio. Esa parece ser una de las funciones del sueño. Así que, a dormir.
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3 comentarios:
Felices sueños!
y sueños felices!
Stitch ha vuelto!...
Que rico es dormir, que rico descansar y desconectarte del mundo entero, solo tus sueños y tu, no hay más. Amo dormir y me traumo cuando no duermo. el sueño es la medicina del cuerpo.
JuanPa! Me de mucho gusto el reencuentro con su hijo! jeje Un abrazo compadre
Luna: ... sí, es muy rico... pero también es muy duro despertar jejeje... bueno, algunas veces más que otras. Pero es verdad, el sueño repara, como dicen por ahí. Un beso
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